Sesiones de juego: Juegos en la asociación y torneo Terra Mystica

Encadeno unas nuevas sesiones de juego, ya que estas épocas son muy malas y es lo que menos tiempo me lleva (el resto lo empleo en... materias lúdicas ;) ). En esta ocasión hablaremos de Terra Mystica, un euro de esos que tienen el tema pegado pero que te quiebra el coco por lugares que no sabias ni que existían y del cual me vi "obligado" a participar en un torneo ¡de esos que tienen premio y todo! y de nuevo de Quarriors, que es un juego que suele gustar a todos por su sencillez y rapidez.

Nuestros protagonistas de hoy.

Descanso en la asociación

El martes coincidí de nuevo en la asociación con Sergio y uno de sus amigos y tuve oportunidad de estrenar con ellos la expansión de Quarriors: Quarmageddon. Como ya sabían jugar apenas hubo que explicar mucho y nos metimos pronto en vereda. La partida fué (como viene siendo habitual cada vez que salen nuestros amigos verdes (goblins) a mesa) un intento constante de puntuar a dichos bichos pequeños por parte mía y de Sergio, sin embargo su amigo opto por comprar criaturas mas fuertes como defensores que nos encarecían las invocaciones y Deathdealer de los que se puntúan tras matar a una criatura, ¡e incluso compró un dragón! Y no hubo nada que hacer mas que observar impotentes como no conseguíamos puntuar nada mientras él se paseaba por el tablero de puntuación.

Como veis, si tenéis la set-up box de Quarriors! No necesitareis para nada la caja de la expansión. ni siquiera he tenido que apilar los dados en la parte de fuera para que me cupiesen en la caja del juego básico.

Con ganas de revancha decidimos echar otra, esta vez se unió Rafa, que nos había estado viendo. Hubo combinaciones muy interesantes sobre el tablero, había tres criaturas muy poderosas, el Seraph de la expansión que se puntúa tras matar si tienes un hechizo preparado, el lord de la expansión que recupera dados usados y los añade a tus activos y el dragón de coste 9 que puede puntuar 6; y junto a ellos el gnomo bárbaro que destruye criaturas cuando le destruyen a él. Pero tras conseguir invocar a un Seraph y un dragón a nivel 3 sin Gnomos cabrones en el campo, me hice con la victoria. La clave estuvo en que conseguí hacerme con 3 portales y tener pocos dados en el saco (gracias al Fantasma que elimina los dados básicos y a que conseguí puntuar los asistentes sacrificando criaturas mas poderosas en los ataques que me hacían) así que prácticamente tiraba todos mis dados en cada tirada.

Torneo de Terra Mystica.

La reseña de este pedazo de euro está al caer.

Así es, una llamada desesperada diciéndome que por favor me llevase mi copia de Terra Mystica para un torneo hizo que, de paso, me quedase a participar en él. El torneo empezó temprano y lleno de gente que no conocía, exceptuando a Alberto y Marta (del torneo de Quarriors). Se jugaba con el reglamento normal salvo en la preparación de partida que se modificaba lo siguiente:

• Escoger una facción: Tras colocar las losetas de puntuación y de bonificación, empezando por el último jugador y en sentido inverso a las agujas del reloj, cada uno escoge la facción que desee y la aparta. Una vez escogida una facción por jugador, se procede a subastarlas: Cada jugador dispone de 30 PV para pujar por las facciones. El jugador principal saca una facción y dice la cantidad de PV (que puede ser 0) que va a pagar por jugar con esa raza, en sentido de las agujas del reloj se continúa la subasta pujando o pasando (si se pasa ya no se puede seguir pujando por esa facción) hasta que haya un ganador, dicho ganador coge el tablero y los componentes de la facción subastada y coloca su marcador de PV en 30 - la cantidad pujada, (que repito, puede ser 0). Se continúa así hasta que todos tengan una facción (la ultima se adquirirá por 0 PV). Si el jugador principal, gana una puja, abrirá la siguiente subasta el jugador que aún no tenga facción mas cercano en sentido de las agujas del reloj.

Esta regla es muy conocida y empleada para garantizar el equilibrio del juego, y si bien yo ya había jugado con ella, había muchos que eran nobeles y eso se notó. En mi primera mesa elegimos Hadas, Sirenas, Nomadas, Ingenieros y Druidas oscuros o Darklings. Yo escogí las hadas aposta, (una de las peores razas, pero que considero que se manejar suficientemente bien) pues tras escoger mis compañeros a los Darklings, Nómadas y Sirenas (muy populares), esperaba que se desatase la locura en las pujas y que mis oponentes gastasen mucho, pudiendo adquirir las hadas como ultima puja a coste 0. Y así pasó, se llegaron a pagar la friolera de 27 puntos por los Darklings, más de 15 por Sirenas y Nómadas, por los Ingenieros se pagó unos 10 y yo me lleve a las Hadas gratis. La partida me fue bastante bien, ya que en concreto dos jugadores se notó que apenas habían jugado una partida o dos, pero estuvo realmente reñida entre el jugador de los Darklings (Mateo) y yo que, a pesar del gran desembolso inicial, acabó sólo 11 PV por detrás de mí.

Hadas, Nomadas, Sirenas, Ingenieros y Darklings fueron los contendientes de la primera ronda.

Terminamos bastante más tarde que la otra mesa (en gran parte por los dos novatillos a los que hubo que explicar algunas cosillas y por el análisis parálisis del tercero en discordia), y cuándo terminamos hicimos un pequeño descanso en el que comenté con Alberto y Marta como había ido su partida (ninguno logró clasificarse) y en el que salió algún filler que otro, aunque yo preferí descansar y revisar mi copia que había traído para el torneo (hombre precavido vale por dos).

En la mesa final estábamos 4, los 2 primeros de ambas mesas, con lo cual se suponía gente experta que sabía lo que iba a pujar, así que la estrategia de antes quedaba descartada. Sin embargo medio en broma medio enserio fuimos cogiendo razas que dependen mas o menos de su fortaleza, cuando las bonificaciones por construir fortaleza/santuario estaban las dos en la 5 y 6 ronda. Así salieron, Brujas, Tritones, Alquimistas y no recuerdo exactamente quien cogió los gigantes... pero vamos, menudo trol (en mi opinión son peores que los fakires, aunque aquí se demuestre lo contrario). El caso es que el miedo a que te tocase semejante aberración (encima muy dependientes de su fortaleza) sumado a que las otras razas eran bastante buenas infló las pujas de nuevo, y yo que soy de la cofradía del puño cerrado... pues gigantes al canto (aunque me sigo arrepintiendo de no haber cogido por 10 a los alquimistas).

La oveja negra entre tanta facción bonita... Los gigantes.

Sin embargo la partida fue otra historia, situé mis dos viviendas relativamente cerca con la esperanza de comunicarlas cuanto antes para puntuar el bonus por ciudad, que estaba en la segunda ronda, y hacerme de paso la cadena más larga; y entre que tenían difícil terraformar páramos y desiertos (que dejaba para lo último) y que se dedicaron a intentar hacerle la puñeta los tritones (que en la ronda 3 iban rodados, todo hay que decirlo) me dejaron un poco a lo mio, y así arañando puntillos de algunos turnos que se me dieron francamente bien (bendita puntuación por palas, que además me proporcionó unos buenos ingresos por el culto), de algunos cultos y que conseguí hacerme la cadena más larga, me alcé con un segundo puesto que me supo a gloria, por detrás de Mateo que hizo una brillante partida con los Alquimistas, demostrándome que si le gané en la primera, fue por la sobrepuja de sus adorados Darklings (le va el color negro al chaval).